miércoles, 28 de noviembre de 2007

Día 15 - Noche de Brujas (6 de octubre)

Nuestro primer objetivo, salir de Rotterdam camino a La Haya.


Esperabamos grandes paisajes en La Haya, seguramente los había, pero en unas pocas horas no pudimos verla. Lo único que pudimos comprobar esque "13 Rué del Percebe" está allí.




Y un cartel de nuestros salvadores durante todo el viaje: Los plátanos "chiquita banana".





Tras no ver nada más que eso, partimos a Brujas con sus escalas correspondientes, unas cuatro.





Primera impresión de Brugge muy buena, ciudad estilo medieval con adoquines por todos lados.

Llegamos ya tarde y solo pudimos hacer un paseo nocturno comiendonos un gofre ¡¡uuuuuuuum que rico!!


Cuando regresamos al albergue (si esque se le puede llamar así) había concierto en el bar. El albergue el más cutre en el que hemos estado, pero por lo menos tenía un bar animado. En ese momento conocimos a una Mexicana bastante maja.


En la próxima entrada conoceremos más de brujas y de su cutre-albergue.

martes, 27 de noviembre de 2007

Día 14 - Rotterdam, la ciudad de los elefantes (5 de octubre)

Salimos de Amsterdam por la mañana temprano y nos despedimos del stayokay.







De camino a coger el tranvía nos paramos a hacer las fotos correspondientes y a echar una partidilla al ajedrez gigante. Si no sabeis como se juega a esto, aqui está vuestro amigo "Horsi" para explicaroslo.





Muy instructivo ¿no?

Solo quedaba coger el tren hacia Rotterdam.



Una vez llegamos a Rotterdam, ya vimos que no había mucho que ver. Aunque algo sí, recordaís que Ángel tenía un gusto especial por las figuras de colores que habitan por las calles, bien, pues en esta ocasión fueron los elefantes y en grandes cantidades los que habían durante todo el paseo por el margen del río hasta el albergue, no tenía perdida era una calle al lado del río lo que había que seguir, pues ahora preparaos para el show de Ángel y sus elefantes de Rotterdam.


El elefante del circo




Elefante indio





El Spiderman





Elefante-mapa





Elefante cebra





Este estaría en el río...




Elefante militar






Metal Sheet





Elefante Heavy




Elefante vegetariano




Ni más ni menos que 10 elefantes en el camino del albergue a la estación de tren.

Y dos menciones especiales antes de acabar con el día: Nuestros compañeros de habitación. La Saturday nigth room.







A parte de los 2 que llegaron de madrugada al albergue, acostandose encima de nuestra ropa y despertando a todo quisqui, teníamos a otros 2 que durante la noche desaparecian y durante el día estaban durmiendo en su cama con zapatillas incluidas, los compañero-murciélago. Les dejamos una trampa incluso para que cuando llegasen pensasen que había alguien en la habitacíón y no hiciesesn ruido :p.





El otro suceso del que os hablaba, fué el del erizo. La cuestión esque encontramos por la calle un erizo que vagaba "como Pedro por su casa". Yo comenté que nunca había visto un erizo por la parte de abajo, la cara quiero decir, salvo Rizo, el erizo picón del anuncio de genesis. Asique Pablo decidió moverlo para que lo pudiesemos ver. A todo esto, apareció una nativa en bicicleta que se puso hecha una furia metiendose con nosotros diciendo que lo dejasemos en paz: "Es un ser vivo como tu" decía.




Creo que también debería comentar el asunto vagabundo de estos lugares. Bien, en Suecia pudimos comprobar que no había delincuencia ni pobreza, lo tienen todo muy repartido, como diría Pablo: "En Suecia no hay delincuencia porque no está permitido". Bien, pues en Amsterdam y Rotterdam encontramos a sendos vagabundos pidiendonos dinero, pobrecillo. Pues la anécdota no es esa, lo que pasó esque los hombres, evidentemente, nos pedían el favor en Holandés, pero al observar que no sabíamos su idioma, pues nos lo pedía en inglés, pobre bilingües señores, en España no estarían en ese estado de pobreza desde luego, con dos idiomas. Esos sí, tenían una educación que ya la quisieran en otro lugares: "Me podeis dar algo, si puede ser sino nada" a ver que vagabundo te dice eso aquí.

Bueno, pues esto nos dió de sí el día, los elefantes de Ángel, el erizo, la saturday room. Ale, hasta la próxima.

lunes, 26 de noviembre de 2007

Día 13 - I Amsterdam (4 de octubre)

¡¡Bienvenido a la aventura de la bici!!

Por la mañana alquilamos una bicicleta, algo indispensable para Amsterdam. Unos 8€ nos valió el alquiler. Asique, bicicleta en ristre, echamos camino al carril bici.

Fotos en el cartelaco de "I Amsterdam" donde todos los turistas se fotografían y nosotros no somos menos, aunque era dificil pillar el cartelico sin gente por enmedio.





Visitamos la plaza del Dam, el barrio rojo y poco más.



El barrio rojo merece ser comentado, como estaban las prostitutas en los escaparates, todo lleno de cofee shop y toda la perversión posible en un barrio. A Ángel le salio de repente una prostituta por una puerta que a punto estuvo de embaucarle XD.



Vemos la casa más pequeña del mundo, en la calle Single nº7.


El mercado de las flores


Y para los que nos creías unos guarrindongos, aquí una prueba de que somos limpitos, fuimos a la lavandería del albergue y todo. Mientras cenabamos unos sandwich ¡¡a las 6,30 de la tarde!!




Como anécdota, cuando entramos en la habitación había un tiparraco sentado en la mesa de la haitación (era una habitación para 16), escuchando música rock española y con la camiseta de naranjito. Pues Pablo solo se le ocurrió decirle: "Hello", perfecto.

Por la noche más bicicleta y a tomar cervecicas.
















Aquí un par de videos de nuestros paseos en bici por Amsterdam, uno por el Vondelpark y el otro por un tramo de un carril bici.






Veamos también el video del marabalista de Amsterdam, un tío capaz de dar toques con el balon incluso subido a una farola. Lástima que no dejase grabarle y solo pudimos filmarlo dando toques sencillos. El tío era un supercrack





En la próxima entrada os enseñaremos como se juega al ajedrez gigante y partiremos hacia Rotterdam.

Día 12 - De Alemania a Holanda (3 de octubre)

Empezamos el día con resaca, la noche anterio pasa factura.

Desayuno en el albergue prontico que tenemos que partir hacia Amsterdam. Dejamos el albergue y para la estación a coger un nuevo tren.





Pero este no sería un viaje del tirón, demasiadas escalas: Köln-Mönchengladbach, Mönchengladbach-Venlo, Venlo-Eindhoven, Eindhoven-Amsterdam


Mención especial al tren que cojimos es Venlo, con un corpantimento para nosotros y todo.
En el último encontramos a un chinorri que intentaba llegar al aeropuerto con menos inglés que nosotros, quien sabe si al final pudo llegar el hombre.
Llegada a Amsterdam Centraal, cojemos el "tranvía de la muerte" para llegar al albergue. El albergue es el Stayokay, la mujer que nos atendió sabía mejor español que nosotros, a parte de estar tremendísima la muchacha, luego comprendimos que el hablar español era imprescindible para ella, ya que en las calles de Amsterdam se hablaba más español que en muchos de los barrios de Murcia por ejemplo (todos sabemos a cuales me refiero).
Paseillos para ver Amsterdam que a parte de lo dicho, que está llena de españoles, comprobamos que Amsterdam es realmente la ciudad de la bicicleta, es un modo de vida. Tienen sus propios semáforos con su paso de cebra, son más importantes en la circulación que los coches y sobre un carril bici puedes legar hasta el lugar más recóndito de la ciudad.
No hicimos fotos en este día, asique tendreis que esperar a la próxima entrada.
-------------- POST COMENTARIO -------------------------
Esta es la canción con la que nos despertaba un compañero de habitación en Amsterdam.


domingo, 25 de noviembre de 2007

Día 11 - La noche de la muerte (2 de octubre)

3er día en Colonia.

Por la mañana vamos a ver la universidad de Köln, donde damos de comer el pan de desayuno a los patos, solo deciros que ni ellos lo querían.


Después de que los patos nos deseasen la muerte, fuimos a otro museo, el del chocolate. Por supuesto solo entramos a mear en los baños del museo, fieles a nuestra costumbre. En nuestra defensa diré que la entrada valía 4€ y no incluía el comer chocolate, solo verlo.

Por la tarde un paseo de los nuestros, observar a estas alturas como estaban los pies de Ángel.


A llegar a la habitación, recordais que teniamos una habitación de 8 pero con dos literas a cada lado de la habitación separadas por una puerta, descubrimos que teníamos un nuevo visitante, pero que nunca apareció, solo su mochila. No sabemos si el compañero fantasma salio despavorido por nuestra colada o estaría de fiesta en el teatro, que era un sitio de fiesta al que pasamos a la 1 de la tarde y seguía abierto.

Mención especial debería hacer a nuestras otras 4 compañeras de habitación, sobretodo a dos de ellas. Ellas se acostaban a las 10 de la noche y se levantaban a las 10 de la mañana, no sabemos que harían durante el día, pero yo apostaría a que picando piedra para la catedral. La mujer en cuestión tenía un diário donde contaba las impresiones sobre las ciudades que había visitado, todas ellas con un encabezado donde en una palabra definía lo que le había parecido la ciudad es cuestión, por ejemplo, en Valencia ponía: Valencia: "Hot", pero claro, si duermes 12 horas de noche claro que Valencia es "Hot", si quereis saber cómo diablos sabemos lo que puso en su diario hablad con Pablo. Y direis, "joe, pues luego se levantarían partiendo el aire", nada más lejos, las muchachas se levantaban con una cara de sueño que parecía que regresaban de fieta toda la noche. De las otras dos compañeras, había una que se puso malita y decidimos ayudarla, aunque nunca recibimos gratificación por su parte...


Por la noche cenamos unas salchichas con patatas un poco extrañas, kartoffell o algo así, muy raras. Nosotros las definimos como patatas de cartón, creo que eso lo dice todo.



Después, decidimos que era el momento de pegarnos una buena salida nocturna, asique, cerveza en mano, salimos a buscar algo. Y encontramos el "Stadtvenlo". Allí conocimos a una tiparracas. Seguramente oireis versiones de que les robé el tabaco y las muchachas se enfadaron, pero la verdadera historia esque yo ví una cosa amarilla sobre la barra y pensé que era un panfleto de publicidad, y decidí conjerlo para ver que decía, para mi sorpresa resultó ser tabaco de liar de las muchachas y fué por este suceso por lo que las conocimos con nuestro inglés de barbate.



Después de estar un ratico allí y ponernos bastante tibios, decidimos volver al albergue paseando con el temor de perderse por la Colonia alemana.


Al llegar al albergue, típicas fotos de borracho... en el suelo, lamentable.






En ese momento se habrio una puerta, pero pocos recordamos el suceso.


Por fin llegamos a la cama bastante tarde, pues al día siguiente deberiamos "madrugar" para el desayuno y dejar el alergue antes de las 10 y partir hacia el próximo destino: Armsterdam. Pero ya sabeis, eso será otra entrada.

sábado, 24 de noviembre de 2007

Día 10 - Düsseldorf - Köln (1 de octubre)

En este día sois bienvenidos.


Por la mañana cojimos el tren hacia Düsseldorf que está a una media hora de Colonia.







Düsseldorf es una ciudad bastante pequeña en la que tampoco teníamos mucho que ver.














Sinceramente lo más curioso que vimos en Düsseldorf fué un pollo con batín y una bolsa en el pico, literal.




Por la tarde regresamos a Köln y comemos la pasta gratis que nos proporcionaba el albergue. Con su cerveza después por supuesto.


Damos un paseo por la ciudad de noche donde vimos que clase de modelos de calzoncillos hay en Alemania, una tienda con lentejuelas y algunas chorradas más. Para más fotos ya sabeis.













Antes de dormir, descubrimos que en el bar del albergue había futbolín, y como buenos españoles lo tuvimos que probar. ¿Qué dices? ¿que para el futbolin son 4 personas? Aaaaaay bird bird. Pues una alemana colorada y borracha se puso a jugar con nosotros al futbolín. No sabeis lo que lamento no tener fotos de eso.


Todos sabemos que cuando juegas al futbolín y la pelotita se queda entres dos "jugadores" que no pueden golpearla, lo que se hace es darle un empujoncito con el dedo para que la bola vuelva a estar en juego, pues bien, la alemana tenía un sistema algo más rudimentario pero igual de efectivo. El sistema consistía en levantar el futbolín por encima de nuestras cabezas dando un golpe mortal al suelo que hace que la pelota vuelva a esta "in game", incluso marcaba goles así, una tipa con clase.


Pero eso no es todo. Los equipo estaban formados por Pablo con la alemana del campo y enfrente Ángel y yo (el resultado es lo de menos :p). La alemana nos deleitaba con gritos como: ¡oh yes! ¡oh yes!, ¡fuck, fuck! y ¡yaboooool! ( o algo así, ella así lo pronunciaba, supongo que la "y" sería una "j") que luego deducimos que significaba "muy bien" en alemán.


Y ahí no quedo la cosa. Los goles eran celebrados efusivamente por la susodicha, dandose un abrazo con Pablo de "quítame ahi esos meneos", y para colmo de la cosa mariposa, la alemana preguntó ¿you have a girlfriend? En ese "germanglés" que tienen los alemanes, a lo que Pablo respondió: "yes yes". He ahí un hombre, unos le criticareis y le deseareis la muerte, otros, como yo, le aplaudimos esa gesta de caballero.


Eso es lo que dio el día, viajes, caminatas, cerveza, futbolín y risas multiplicadas por las rubias alemanas (las dos) y un tipo de la MTV que debería perder siempre el reloj y decidió comprarse uno "weno weno" para llevarlo al cuello.



Hasta la próxima entrada en la que pasaremos nuestro último día completo en Colonia.